martes, 26 de febrero de 2013

mal de muchos......bajada de prima.......

Buenas tardes amigos:

Estamos presenciando momentos convulsos en nuestra vieja Europa, una agencia de calificación modifica la nota al Reino Unido, Italia acaba de salir de unas elecciones en las que no se vislumbra un gobierno con un mínimo de estabilidad, y para colmo otro estado sufre una dimisión de su máximo representante, aunque ese tributa en una vía más espiritual......


Todos estos movimientos que le quitan estabilidad al sistema político aportan algo que es fundamental para el flujo de capitales, nos introducen incertidumbre jurídica.

Unas de las bases para que los fondos de inversión depositen capital en un país es la seguridad jurídica, tanto la inversión en capital riesgo a través de sociedades, como la compra de deduda soberana tiene un importante porcentaje de justificación en la estabilidad política y la seguridad jurídica.

Es importante conocer que los grandes fondos de inversión y capital riesgo, están compuestos a su vez de las sucesivas cesiones de depósitos que las entidades bancarias recogen de inversionistas minoritarios. Por eso son temerosos, porque en último término tienen que reembolsar un mínimo de capital a los depositantes, con lo que tendrían que enjugar las hipotéticas pérdidas contra su cuenta de resultados.

Es por ello que ante cualquier posibiliad de que las leyes mercantiles de un país se modifiquen, o que dicho país pueda incurrir en riesgos de impago de deuda soberana, los fondos salen como auténticos posesos de las cuentas de ese país. Al final el dinero es temeroso, o mejor dicho, sus dueños.

Esos consorcios de fondos de inversión tienen agoritmos de compra e inversión, que adjudican inversiones a zonas geográficas, de manera que tienen asignado un montante de su potencial de compra a inversiones en paises del sur de Europa con calificaciones de deuda "no óptimas"...   Ya se lo que estáis pensando:

Ese conjunto llamado "paises del sur de Europa", es un conjunto disjunto que a su vez tiene miembros de diferentes perfiles de pago , y en función de esa calidad de pago recibirán inversiones.

Al final la calidad de pago marca directamente la cantidad y el precio de la inversión, y por ello los países que mejor se comporten en calidad de pago y seguridad jurídica recibirán una confianza superior a la hora de emitir deuda.

Y en eso llevamos ventaja, porque se mide en términos comparativos, la prima de riesgo es un valor relativo y que nuestro entorno tenga alguna dificultad, facilitará sensiblemente nuestra financiación como país.

Vamos poco a poco, pero vamos.

Un saludo de vuestro primo de riesgo.


lunes, 11 de febrero de 2013

Los derechos y el segundo párrafo...

Abunda en nuestras tertulias televisadas o de barra, el debate acerca de los recortes en servicios públicos y cómo afectan a los habitantes de ésta nuestra comunidad. Es normal escuchar quejas por la reducción de un servicio público, de una subvención, de la minoración de empleos públicos o cualquier otra circunstancia que salga de los presupuestos generales del estado, región o ayuntamiento.

Nuestro querido periodísta Jordi Ébole, más conocido como follonero, está haciendo un repaso por los sectores de servicio público más recurrentes, analizando cómo afecta la reducción a los beneficiarios de dichos entes.

Es normal que todos aquellos usuarios de un bien o servicio público nos quejemos de la reducción en sus prestaciones pero nos falta un segundo párrafo.   Os propongo varias preguntas:

Rechazamos la gestión privada de un servicio público como la sanidad, pero... ¿deberían incluir nuestra sanidad pública la atención de ciertas enfermedades en centros hospitalarios de paises extranjeros cuando su desarrollo e investigación estén más avanzados en los mencionados centros?

¿debería incluir la sanidad pública la cobertura de intervenciones no necesariamente sanitarias como cirugía estética o similares?

Al final estas preguntas con trampa, nos llevan al mismo punto de encuentro, todo cuidado sanitario deberia ser prestado al máximo de nuestras posibilidades como país, no siendo el criterio económico la premisa para asumir o no un cuidado o una prueba médica. Pero.... ¿donde ponemos la raya? ¿por qué las cuestiones anteriores podrían considerarse lujos no asumibles y una prueba diagnositca no?

Seguro que me comprendéis:  España como país, las comunidades autónomas, o la administración que proceda, es libre de establecer, pactar, promulgar y sancionar la ley que considere adecuada para establecer los derechos de la población en cuestiones como la sanidad y la educación. Pero nos falta "el segundo párrafo".

Definido el derecho, tenemos que definir cómo nos lo pagamos. La financiación de un servicio público es algo que se nos suele olvidar una vez definido el derecho a pecibirlo y eso nos mete en problemas.

Esa financiación de un servicio masivo, es algo que debe ser calculado con mesura y prudencia,  debe tenerse en cuenta la pirámide  de contribuyentes y beneficiarios, y sobre todo su posible evolución.

Pero faltan propuestas concretas, tan solo tenemos ideas y tendencias;
el manido recurso a poner impuestos a las "rentas altas", no acaba de aclarar el coste del servicio, los ingresos alcanzados hasta el momento, y el incremento que aportaría la medida.

Una cosa es que estéticamente sea justo que a mayores ingresos, se aporten mayores impuestos, pero otra cosa diferente es que incluso si pusiésemos impuestos absurdos del 125% de los ingresos a ciertas rentas, si gravásemos a la banca,o  si expropiásemos a la Duquesa de Alba todos sus bienes.... aún así no lograríamos pagar el coste de los servicios públicos como los entendíamos hasta hace un año.

Debemos enteder colectivamente que el sostén de un servicio público viene dado por la recaudación de impuestos masivos, si no entendemos que los servicios nos los pagamos entre todos, no hemos comprendido que somos una sociedad.

Los partidos políticos no son suicidas, y saben que cuando reduccen prestaciones públicas son menos votados y se les descabalga del poder, ¿por qué aplica nuestro actual gobierno entonces los recortes?
¿por qué el anterior gobierno de signo socialdemócrata no los incrementó universalmente a niveles no conocidos? muy sencillo, se trata de presupuestos, y de presupuestos que se tienen que recaudar de manera mayoritaria entre los contribuyentes de rentas medias y bajas por un mero hecho de pirámide poblacional.

Como decía hace unas palabras, podemos prohibir a los ricos ser ricos, podemos subir los impuestos a los acaudalados hasta límites no sospechados, pero tenemos que hacer los cálculos para pagarlo entre todos.

Me pregunto si los empleados públicos de esos servicios admitirían una rebaja sustancial de sus emolumentos o si para evitarlo, nosotros como contribuyentes admitiríamos una subida de nuestros impuestos para mantener el servicio en nuestros actuales costes.

Lo dicho, siempre que definamos un derecho, no debemos olvidarnos del segundo párrafo.. ¿cómo lo pagamos?

Un saludo de vuestro primo de riesgo.




lunes, 4 de febrero de 2013

Que paguen las rentas altas...según desde donde se miren.

Buenas noches amigos, hoy quiero reflexionar acerca de un concepto que llamamos progresividad fiscal y que está detrás de muchas de las protestas diariamente se escuchan entre la población de este viejo país.

Somos una sociedad con falta de sentimiento colectivo, hemos pasado por una transción oligárquica en la que un muy pequeño extracto de ilustrados capitanearon un paso de una dictadura militar disfrazada de parlamentaria, a una democracia participativa en dos sentidos, el voto y los impuestos.

En esos años se diseñó un sistema de impuestos que basado en una pirámide poblacional propia del momento, establecía cierta seguridad de financiación de los servicios públicos en base a una progresividad fiscal que incrementaba la presión en función del incremento de la rent. Pero tenía claro que la principal base de recaudación se logra con una moderada presión fiscal sobre una base muy amplia de contribuyentes, que no es exactamente lo mismo que habitantes.

Como dije en ateriores letras, España ha despertado de la fiesta con mucha resaca justo cuando el de las bebidas trae la cuenta, pero diablos¡¡,
 ¿nadie se daba cuenta de que había que pagar todo lo que nos habíamos tomado?

Acabado el grifo de la refinanciación con emisiones de deuda, toca recaudar impuestos para pagar no solamente nuestros servicios publicos corrientes, sino para pagar las deudas atrasadas con otros paises.
Pero en un alarde de solidaridad, la población se manifiesta sectorialmente cuando se recorta en su ámbito.

Voy a ser muy duro, pero no me vale que los profesores se manifiesten por la educación pública, porque lo hacen por sus puestos de trabajo como empleados públicos y sus ingresos derivados.
No me vale que los médicos defiendan la sanidad pública porque en realidad defienden sus ingresos personales como empleados de la sanidad pública.

En España solamente reaccionamos cuando el estado nos recorta condiciones laborales o de subvención, pero esas manifestaciones deberian haberse producido años antes, cuando se dilapidaban los presupuestos de los respectivos departamentos, sin preocupación acerca de las fuentes de ingresos.

Una vez alcanzado el punto de tener que pagar la factura, una vez acabada la orgía de invitaciones con pólvora ajena, toca decidir quien saca la mano del bolso.
 Y de manera unánime apuntamos a un concepto que nos hace dormir tranquilos y que aporta un falso sentido de justicia social, LAS RENTAS ALTAS.

El concepto de progresividad fiscal es un sistema de justicia social por el cual, con el principio de que quien más puede contribuir, más puede disfrutar; los porcentajes impositivos sobre la renta anual de las personas van incrementándose según se van incrementando dichas rentas.
El sistema no es lineal, no incrementa continuamente la carga fiscal con la renta por su complejidad de articulación, sino que establece escalones, es decir: de rentas de 10000  a 15000 €, 15%, de 20000 a 25000 € , un 25%, etc.
Derivado del propio sistema entenderéis que no se puede exigir a nadie que sea altruista con su dinero, y obviamente, los primeros escalones de cada tramo son evitados en la medida de lo posible para no subir un escalón de procentaje de impuestos  por un incremento leve de la renta.

Os propongo un ejemplo a colación de mi simil con la ronda de bebidas;
si una vez acabas las rondas decidimos que va a pagar el que más dinero lleve en el bolso,
  resulta que yo tengo 5€ más que el segundo más acaudalado, pero la ronda supone 30€...
 coincidiréis conmigo en que me conviene más tirar al suelo 29€ que declararme el más rico de todos.

Esto mismo llevado al sistema fiscal nos hace caer en la conclusión de que cuando establecemos incrementos importantes de los impuestos a los tramos más altos de renta de los contribuyentes, podemos llegar al punto de que se haga más interesante ganar menos dinero porque el resultado final post impuestos sea más beneficioso.
 Hay una máxima en economía que obviando su expresión latina, viene a decir que cuando varias circunstancias tienen relación entre sí, no podremos aislar la que nos conviene para modificarla, porque el resto se verán modificadas inmediatamente.

Hace ahora un año y medio, y más recientemente en verano, dos gobiernos incrementaron el IVA porque entendían que sobre una base de recaudación más o menos consolidada, el incremento del porcentaje del impuesto subiría el neto de la recaudación, sin embargo el cálculo que muchos hacíamos se cumplió: el imcremento del impuesto subió los precios, que rebajaron la demanda, que redujo las operaciones, dejando la recaudación en términos más o menos similares a antes de la subida pero con menos transacciones, es decir menos PIB.

El manido recurso de recurrir a incrementar los impuestos a las RENTAS ALTAS, que suelen manejar los partidos de izquierdas, cuando se les inquiere acerca de los recursos para los servicios que alegan que se deben mantener, da en duro en cuanto se quiere concretar ese umbral de rentas altas, y ¿por qué?

Porque  como empezába diciendo, hay algo que no les deja decir la verdad, y es que en un sistema de progresividad fiscal, la pirámide poblacional y de población activa manda.
Podríamos ponerles un impuesto del 99% de su renta a todos los que ingresen más de 100 000 € al año, y dando por hecho que ninguno de esos contribuyentes dejase su actividad o trabajo, no serviría porque la recaudación no serviría para que los servicios se prestasen a los millones de beneficiarios que por derecho tenemos en la sociedad.

Conclusión: La definición de renta alta podría sorprender a muchos incluyéndole en ese grupo de malvados privilegiados que a priori veían lejanos.
El secreto está en una carga ligera, pero masiva, a rentas bajas y medias, que sea asumible por la mayoría. Con un incremento lo más lineal posible de la carga que no sea disuasorio para aquellos que acumulen patrimonio, vamos lo que tenemos, pero contado a las claras a la sociedad.

Aún estoy esperando a que algún grupo concrete a qué llama renta alta, que carga le pondría, y lo que prevee que se incremente la recaudación.

Y no lo hacen porque los números reales no le saldrían, con lo que el argumento se quedaría en mero eslogan electoral.

Mañana os seguiré contando.






lunes, 14 de enero de 2013

Los servicios públicos y su financiación.

Hoy seré un poco duro en mis teorías, quizás no acompañe al sentimiento de la mayoría pero me gustaría que reflexionaseis sobre mis palabras y me trasladéis vuestra opinión.

Llevamos largos meses asistiendo a la sistematica protesta de cualquier colectivo que preste servicios públicos y reciba el anuncio de la privatización del servicio.

Lo primero que debéis saber es que un servicio debe considerarse público o privado en función del poseedor de la titularidad de dicho servicio y no de la empresa que intermedie, por ejemplo:

¿Es el trasnsporte urbano un servicio público o privado?, ¿puede establecer libremente las tarifas? ¿de donde cobran sus empleados? esas preguntas os colocarían en la perspectiva de un negocio privado pero con ordenación pública.

Al final se trata de que el receptor del producto o servicio, acceda al mismo vía libre mercado o con unas regulaciones establecidas por una administración pública y amparado por unos precios regulados por la autoridad que proceda.

Existen taxis, colegios, hostpitales, autopistas, y demás servicios que regulados por nuestras respectivas administraciones, se prestan gratuitamente al ciudadano o a un precio reducido, pero usando a una empresa privada como intermediario.

La verdadera pervivencia de un servicio público no se preserva en función de la exsitencia de empleados públicos en detrimento de una empresa intermediaria o viceversa. Se trata de que la pirámide de explotación se cumpla, se necesita la pequeña aportación de muchos usuarios que no hacen uso del servicio para no cobrar el gran coste a aquellos que necesitan valerse del mismo.
No sería posible facilitar ciertas pruebas diagnósticas, o un número determinado de profesores por alumno a muchas familias que hacen uso de estas prestaciones, si otras muchas no aportaran impuestos para ello sin hacer uso.

Esta balanza venía deviándose en los últimos años porque como vimos en anteriores post, las administraciones no se planteaban si los servicios se venían pagando o no con impuestos, porque acudían a emisiones de deuda;
pero el despertador sonó y nos encontramos con ingentes cantidades de empleados de empresas públicas, ojo no son funcionarios, que engrosaban las listas de personal con condiciones asimiladas a un funcionario real, y con índices de  absentismo que nada tienen que ver con el personal de empresas privadas.
Con mis palabras no quiero generalizar, pero las estadísticas lo indican así, no hemos tenido una sola manifestación mientras hacíamos tambalear los cimientos de nuestros servicios públicos con un sobrecoste no asumible.
Sin embargo en cuanto la aparente amenaza de una gestión privada se cierne sobre los contratos laborales de los empleados de empresas públicas, las masas salen a la calle en el convencimiento de que se tambalea el propio servicio público.

Yo como contribuyente quiero que el día que tenga una necesidad, se me cubra, y que si es posible, la cantidad que se me exige para financiar dichos servicios se aquilate a lo extrictamente necesario.

Por otra parte, si el personal de empresas públicas tiene que tener condiciones laborales asimilables a una empresa privada, no veo inconveniente alguno, porque estas últimas están reguladas por convenios y obligaciones legales que marcan unos mínimos y se revisan trimestralmente si la empresa quiere seguir prestando el servicio a una administración pública.

Por eso siento mucha tristeza cuando veo ordas de gente aludiendo a la eliminación de servicios públicos cuando en realidad lo que se puede eliminar son ciertos privilegios laborales establecidos cuando el trabajador de una empresa pública no tiene obligación de velar por la viabilidad económica de la entidad en la que trabaja.

Por último recuerdo que no es lo mismo viabilidad que rentabilidad, y que cuando miles de personas aducen razones de rentabilidad para asignar servicios públicos a empresas privadas, quizás se busque una mera viabilidad.

De todos modos, el día que uno solo de mis lectores me asegure que le han cobrado cantidad alguna por una asistencia médica o escolar, me reractaré de mis palabras.

Mis palabras guardan relación directa con mi siguiente post acerca de las "rentas altas"

Un saludo de vuestro primo de riesgo.




miércoles, 26 de diciembre de 2012

La "dación" en pago, ¿por qué no se usa en España?

Buenas tardes y feliz Navidad a todos:

Esta tarde quiero hablaros de la "dación" en pago y los deshaucios de las viviendas hipotecadas.

Antes de nada debéis saber que lo que comunmente conocemos como "hipoteca", es en realidad un derivado del producto original en el que sus orígenes se basaba en el modelo de empeño de artículos.

Una hipoteca es una garantía sobre un crédito, comunmente constituido por un bien inmueble, pero a diferencia de los empeños, el bien es usado por el receptor del crédito hasta la satisfacción del mismo.

Visto así el producto es claro y beneficioso para ambas partes, quien presta el dinero y quien recibe el crédito. El bien se entiende como garantía suficiente y se permite su uso durante los plazos de pago del crédito;
jugada redonda.

Sin embargo, el problema viene en aquellos países en los que la ley hipotecaria, ante grandes subidas y bajadas de los bienes que constituyen la garantía, deriva las hipotecas a préstamos hipotecarios.
La diferencia es importante porque en este caso, es la persona que recibe el préstamo, (o sus avalistas), los que se responsabilizan del pago del préstamo;
siendo el bien solamente una parte de las garantías interpuestas, es decir:

Ante una falta de pago, el propio bien cubre con su propio valor de mercado, y solamente si la cifra no es suficiente se reclamará el restante a los garantes personales.

¿cuál es el drama de nuestros días? , muy sencillo:
Como podéis imaginar, desde que las hipotecas existen, han existido impagos, pero en épocas de bonanza económica el valor de mercado de los bienes hipotecados era siempre mayor que el inicial a la formalización del préstamo, con lo que el embargo y ejecución de esos bienes cubría aproximadamente el préstamo restante a la fecha de la ejecución.

Sin embargo a día de hoy, coincidiendo con las mayores faltas de ingresos de nuestros congéneres, el valor de los bienes hipotecados han caido hasta el punto de que se ejecutan siempre en última instancia, es decir:
después de intentar dos subastas fallidas, el banco se adjudica los bienes por el 50% del valor de tasación.

Podemos opinar si es justo o no que el banco se adjudique la vivienda por el 50% del valor de tasación ante un embargo, pero el hecho es que esas condiciones se firmaban ante notario el mismo día que el banco nos hacía pasar por delante de las narices un talón por el importe de tasación (luego hablo de ello) de nuestra casa, con destino promotor de turno.

Ahí está el problema, hemos accedido a hipotecas por el 80%, el 100% o el 120% del valor de tasación de nuestra casa, y prefiero no hablar de las malas praxis de las empresas de tasación en operaciones hipotecarias durante la bonanza económica 1996-2008. Hemos pedido a los bancos auténticos dinerales que se les entregaban ante notario a los promotores inmobiliarios, en la confianza de que ante cualquier problema nuestra casa costaría más de lo que debíamos al banco, y la historia se volvió del revés.

¿por qué en otros paises no ocurre lo mismo? Es triste decirlo, pero para comparar exactamente situaciones similares en cuanto a embargos, deberíamos observar exactamente que requieren como garantías las entidades que prestan el dinero.

Por poner una muestra,  en Estados Unidos, el valor medio hipotecado es el 53% de la vivienda, y suele pedirse una cantidad económica pignorada como garantía adicional, así que una ejecución de embargo no suele representar en casi nigún caso reclamaciones personales posteriores.

Espero haber sido clarificador, un saludo de vuestro primo de riesgo:

miércoles, 12 de diciembre de 2012

En su momento preferimos las preferentes......

Buenas tardes amigos.

Hoy sabréis cual es el funcionamiento real de ese producto bancario que hace que la gente se encierre en sucursales y cajeros de muchas de las entidades bancarias de nuestro sacro país.

Oiréis en las entrevistas directas a los afectados, "que su dinero ha desaparecido", "que el banco se lo ha robado", ¿cómo puede una entidad regulada por un organismo oficial robar o hacer desaparecer dinero de un cliente? realmente no ha desaparecido, se ha transformado en acciones de dicha entidad.

Los bancos hace tiempo que sabían que necesitaban capital porque el riesgo asumido por las operaciones inmobiliarias y la morosidad se lo marcaba claramente en sus balances.
Entonces optaron por un cambio de estrategia: intentaron que los depósitos de sus clientes, normalmente contratados como plazos fijos, y de obligada devolución al vencimiento, se transformaran en dinero sin fecha de devolución.
Veamos:

Las participaciones preferentes son cantidades de dinero que los clientes  prestan a los bancos con el objeto de que la entidad pueda disponer de ese capital a cambio de una rentabilidad fija prefijada, sometida a ciertas condiciones que hasta el momento venían cumpliéndose sin excepción.
Por ejemplo, te ofrecían el 4% del capital prestado anualmente, siempre que el banco diese beneficios, cosa que venía ocurriendo veinte años atras. Al finalizar los tres años, el banco se guardaba el derecho de devolverte el dinero transformado en acciones. Eso no tenía mucha importancia porque el valor de la acción de esa entidad venía manteniéndose en valores mas o menos altos desde al menos hacía diez años.
Ni que decir tiene que también exixtían los IPF o imposiciones a plazo fijo que retribuían con mas o menos la mitad de los intereses de las participaciones preferentes.
El escenario era claro,
opción 1: plazo fijo, poco interés, riesgo cero de recuperar el capital
opción 2: prefentes, más interés a cambio de aparentemente muy poco riesgo, muchos optaron por esta vía......

Y por desgracia muchísimos optaron sin saberlo, sus directores de oficina propiciaron la venta de estos productos, que le dejaban al banco más margen de maniobra, y sobre todo proporcionaba al banco la posibilidad de quedarse con el capital, devolviéndole al cliente su valor en acciones que luego podría vender a un tercero.

Pero Mr Murphy llegó con su extenso manto y por supuesto todo empeoró:
Las acciones del banco descendieron a un tercio de su valor, dejó de dar beneficios, y obviamente el banco dejó de retribuir a sus clientes, ofreciéndoles la posibilidad de recuperar su capital transformado en acciones a menos de la mitad del valor inicial.

Por eso moraleja: todos, exactamente todos los productos bancarios que no sean a interés y plazo fijo, llevan riesgo, más o menos riesgo, pero lo llevan .
Y cuando algún tipo de circunstancia tiene solamente un 1% de que ocurra, es simplemente poco probable, no imposible. Y con las preferentes lo poco probable ocurrió.

Realmente los clientes de preferentes, si dispusiesen del margen temporal suficiente, rcuperarían su dinero, incluso con ganancias, esperando a la recuperación de la acción;
hecho que por lejano no es improbable, ya que las entidades afectadas, una vez saneadas, tendrán una evolución al alza del valor de sus acciones.
Otra cosa es que la paciencia, el conocimiento, y el cansancio de dichos clientes de preferentes no acabe con una cadena de acciones violentas contra el gestor bancario que traicionó su confianza.

Saludos de vuestro primo de riesgo.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Las pensiones y el IPC, ¿por qué se actualizan?

Buenos días amigos, llevamos unos días convulsos en los que el Gobierno ha anunciado que la revalorización de las pensiones para 2013 no se realizará con respecto al IPC de 2012 sino a una aplicación de unos valores fijos de subida según ganen o no más de 1000€ netos.

Menudo galimatías de cifras, revisiones, tablas, y siglas.

Veamos de que se trata:


En españa, las pensiones, y alguna otra clase de pagas públicas, deben ir acompasándose al coste real de la vida con el objeto de que la cotización realizada por su perceptor, le permita abordar un nivel de gastos que le permita hacer la vida con normalidad. Esa revisión se suele hacer de un año para otro con respecto a algún tipo de índice de precios como es el IPC o índice de precios al consumo.

Normalmente , se revisa en Noviembre cual ha sido el IPC del año que se acaba para establecer cual será el aumento o decremento de las pensiones para el año que entra, realizándose incluso una pequeña paga compensatoria si se retrasa en aplicar la subida más allá de Enero.

El IPC indica estadísticamente como se comportan los precios en España, existen incluso variantes del IPC que retiran de los cómputos ciertos productos que se consideran estacionales o cíclicos.

De todos modos, usar un índice de precios como referente para una revalorización de las pensiones deriva en individuos que se benefician y otros que salen perjudicados. Si la encuesta del IPC incluye los alimentos frescos y la persona come en algún servicio hotelero, hostelero o asistencial, su gasto no va alineado a la subida o bajada de su pensión;
lo mismo ocurre con el combustible, el vestuario, etc.

Esta vez, y con claros criterios de ahorro económico, el gobierno ha actualizado las pensiones por debajo del indice del IPC, el motivo no es otro que el déficit que tiene hoy en día el país en general, y la seguridad social en particular. Se trata de ser aquilatados en el gasto para asegurar la sostenibilidad del sistema.
Es de justicia que un país cuide de sus mayores, incluso deberían estar mejor retribuidos, pero la realidad de la pirámide de población, y la dependencia de la financiación externa, hace que tengamos que hacer creible el sistema de pensiones a ojos foráneos, y lo que es más importante, a los inversores en deuda.

Podemos decir sin miedo a equivocarnos, que la decisión de no revalorizar las pensiones contribuye a asegurar el pago de lo ya comprometido. Es duro admitirlo pero no elegimos entre pagar mucho y pagar poco a nuestros mayores, la elección es entre pagar poco o dejar de pagarles.

Recordemos que la caja de la Seguridad Social,  se alimenta de las contribuciones de los trabajadores en activo, y que ante la alarmante disminución de las mismas, debemso ser cuidadosos  y al menos no acelerar el déficit de gasto / ingreso que dicha caja sufre con la actual situación de desempleo.

Vamos que si tiramos de ahorros para pagar los gastos diarios de la casa porque no tenemos ingresos, no debemos incrementar los gastos, duro pero real.

Un saludo de vuestro :"Primo de riesgo"

martes, 27 de noviembre de 2012

La bolsa, ¿qué diablos es la bolsa?

Buenas tardes a todos.

Hoy el ibex está casi plano, el volumen de negocio ha sido menor de la media, no hemos tenido suspensión de valores, y las operaciones a corto siguen prohibidas sobre valores bancarios.

Este galimatías de términos tiene en realidad un fundamento básico estremadamente sencillo.

Las grandes compañías, sacan a la venta trocitos miu pequeños de su propiedad, otorgando derechos a sus propietarios, tales como reparto de beneficios y votación en sus órganos de gobierno.
Obviamente la proporción de estos derechos, va en relación a la proporción de capital que uno poseea.

Estos intercambios de propiedad sobre las empresas, se hacen regularmente con un notario, se llevan al registro mercantil, y se pasa a dirigir la empresa comprada, esto se realiza sobre las participaciones de una sociedad.
Pero cuando estos intercambios de trocitos de propiedad sobre una sociedad se hacen sobre empresas de gran volumen, cada trocito de propiedad es pequeño en relación al tamaño de la empresa, y la operación se hace de manera ágil sin recurrir a notarios, lo que se está haciendo es vendiendo o comprando acciones de una empresa cotizada.
Esa compraventa de acciones se hace en la bolsa, porque se establece una relación pura de oferta-demanda; quien quiere vender sus acciones pone el precio que considera adecuado, y quien quiere comprarlas establece el máximo precio que pagaría por ellas.
De esa manera cuando alguien pone un precio para vender, y a alguien le encaja ese precio para comprar, ambos coinciden y se establece la operación sin necesidad ni siquiera de que comprador y vendedor se conozcan.

Estas operaciones se hacen a miles en cada hora, y cuando alguien dice que un valor (o una empresa), vale 10€, quiere decir que la última transacción hecha sobre una acción de esa empresa, se ha hecho en ese precio.

A partir de las empresas más grandes, y con más histórico en la bolsa, se establecen los índices.
De esa manera la tendencia mayoritaria de las empresas incluidas en un índice, es lo que comunmente conocemos como subida o bajada de la bolsa y se establece en porcentaje del último cierre del día anterior.

Cuando veamos que un índice, como el español IBEX 35, sube o baja, queremos decir que la mayoría de sus valores o acciones han subido, o han bajado.

¿Qué se gana con la bolsa?
Con la bolsa se puede ganar de dos maneras, o bien porque las acciones nos den derechos sobre dividendos, es decir, que nos beneficiemos del reparto de beneficios de la empresa. O bien que el valor de la acción suba y la vendamos por un precio superior al coste de compra.

¿Qué se puede perder?
Obviamente, corremos el riesgo de que un desinterés general  en  la compañía de la que poseemos acciones,
haga bajar el precio de venta de las mismas por existir mucha más gente interesada en vender sus acciones que en comprarlas, eso haría que si tenemos necesidad imperiosa de vender por tener que disponer de nuestro dinero, y el precio es menor al de compra, hayamos perdido dinero en la operación.


Consejo: La bolsa es buena inversión, pero es especulativa  porque esperamos ganar dinero sin tener la seguridad, y es arriesgada por su propia naturaleza de especulación.

A medio y largo plazo suele ser rentable, pero nunca inviertas dinero con fecha fija de disposición.

Un saludo de "Vuestro primo de riesgo"

lunes, 26 de noviembre de 2012

"Los Mercados........", tú mismo eres "Los Mercados"

Alguna vez te has parado a pensar ¿quién o qué son los mercados?

Los  mercados que tanto nos golpean, no son un círculo de omnipotentes propietarios económicos que toman decisiones arbitrarias en contra de la población indefensa...
No son extrañas logias de poderes económicos que trabajan de forma oculta...
No son países con una hipertrofia económica faltos de repartir sus excesos de liquidez.....


En realidad los mercados somos nosotros mismos, en un círculo peculiar que como un dibujo animado, sale disparado en una dirección para volver a alcanzarnos por la retaguardia después de unos segundos.

Todo obedece a un esquema lógico y sencillo:

¿Algnua vez os habéis planteado de donde saca un Banco el pequeño margen que ofrece por una imposición a plazo fijo? Pues realmente lo saca del interés que cobra a sus clientes por un préstamo.

Si lo trasladamos a otra escala, entenderemos que para que los bancos y financieras puedan ofrecer algún tipo de interés a sus clientes en productos como los fondos de inversión, las cuentas retribuidas, y los "Libretones", deben aglutinar ese dinero depositado por los clientes, y con esa acumulación, acudir a un tercero que les aporte interés por ese capital, a la vez que se lo prestan.

Digamos que las entidades bancarias tienen dos circuitos con el dinero depositado:
Uno, el minorista, con préstamos o créditos, a personas y pymes, en el que el interes cobrado a unos revierte en el interés retriibuido a otros , previo descuento del margen comercial de la entidad.

Pero cuando esto se produce a volúmenes relevantes de capital, la banca tiende a hacerlo contra préstamos o créditos fondos de inversión, y ¿qué son los fondos de inversión? 
Son entidades fiscales que aglutinan el dinero de los bancos, y en menor medida de los particulares, con el fin de negociar condiciones para esos capitales, obviamente quedándose con un margen.

Podemos entender entonces que las diferentes entidades financieras, van recogiendo el dinero depositado por particulares, empresas, grandes compañías e incluso estados con excedentes de tesorería, con el fín de negociarlo cada vez en mayor y mayor volumen, y a ser posible con entidades de menos riesgo.

Y hé aquí que damos con lo que llamamos mercados, con ese ente que hemos llegado a odiar, porque entendemos que nos roba nuestro bienestar al querer cobrarnos intereses por dejarnos dinero a la masa de ciudadanos constituidos en nación.

Tristemente he de decir que cuando nos quejamos de la actitud de los mercados, entramos como actitud colectiva, en contradicción con nuestros intereses personales e individuales.
A todos nosotros nos interesa que nuestra oficina bancaria nos dé préstamos más baratos, que nos cobre menos comisiones, que nos ofrezca más interés por nuestros ahorros, pero eso al final revierte en que los diferentes escalones en los que nuestro dinero va generando lo que nos interesa individualmente, acaban percutiendo en lo que nos duele colectivamente.

Consejo:  Cuando vayas a pedir condiciones de intereses para tus ahorros, exige a tu entidad, que los fondos de inversión que utilice, nunca compren Deuda Soberana de tu país más cara del 2%.
Sería la única medida útil, pero tiene un peligro......quizás a tu país le haga falta que le compren la deuda incluso al 5%, porque ya no se trate de un caso de conveniencia sino de urgencia.

Os saluda : Vuestro "Primo de Riesgo"



jueves, 22 de noviembre de 2012

El "PIB" y los mercados

Cerraba mi última publicación, explicando como un término como el déficit, se expresaba siempre como porcentaje del PIB, pero....... ¿qué es realmente el PIB?

El PIB, acrónimo de Producto Interior Bruto, hace alusión a la cantidad acumulada de transacciones económicas que se realizan en un territorio, en un periodo dado.

Es decir, la suma de todos los importes económicos que resulten de todas las operaciones de compra, venta, alquiler y traspaso, que se den  entre todas las empresas y partuculares del país.

La compra de un litro de leche forma parte del PIB, el alquiler de un piso forma parte del PIB, y la fabricación de 5000 vehículos en una factoría también forma parte del PIB.

Es un índice muy importante porque marca claramente si la economía de un país crece o decrece, ya que el resto de indicadores son siempre dependientes del PIB.

Es fácil deducir que un país que recaude impuestos tasados en  un porcentaje de cada venta como es el IVA, necesite que haya muchas transacciones para tener más recaudación.

Asimismo si se realizan más transacciones, quiere decir que se compran y venden más servicios y productos, y quien los compra los necesita, y quien los vende los cobra, con lo que las personas y empresas del país tendrán más actividad por lo que se deduce que tendrán más ingresos.

¿Como conoce un país su PIB? Es sencillo, el ministerio de Hacienda, tiene mecanismos estadísticos que le permiten agrupar todas las facturaciones, pagos y cobros que se realizan en un país a raiz de las declaraciones económicas de sus habitantes.

¿Es bueno que el PIB crezca? Absolutamente si, es sano que crezca, y que lo haga sostenidamente para evitar tensiones o burbujas en un sector determinado. Todos recordamos como el sector del la construcción en España se hizo con una parte del PIB que realmetne no le correspondía. Sin embargo es importante que crezca por encima del 2%, porque historicamente se ha demostrado que los crecimientos del PIB por debajo de ese 2% se absorben con el mismo número de personal y empresas que ya existían antes del crecimiento. Sin embargo, por encima de ese umbral de subida del 2%, se requiere de personal y empresas adicionales a las existentes, para poder absorberlo.

Además el crecimiento del PIB, hace que los demás índices dependientes, o que se expresan en porcentaje del PIB, se reduzcan. Léase deuda Pública, déficit, etc.